5 días en los que todo puede ocurrir.
Que vayan pidiendo una ronda.
(de mercadillos).
(en casa tranquila).
(aceptamos barco como animal acuático).
Pero a las 15:00.
Irme de compras e hipotecarme. No tendrán a quién reclamar ;)
Visitar Japón.
Ozú, qué tremendas os ponéis de repente.
Mudarme a Marte (el fin del mundo para los demás).
Enviar un email a toda la oficina con el GIF de Terminator diciendo “Sayonara Baby”.
Dormir sin preocuparme de nada (¿pa’ qué?).
En taxi (no tienes tiempo de aparcar).
En bici (eléctrica y con mascarilla).
En coche (y me marcaría un La La Land en el atasco del nudo de Manoteras).
En mis bailarinas plegables.
En la moto para ir de puerta a puerta.
En escarabajo (no es un coche cualquiera).
Sin bolsas en los ojos. Y por pedir, a las 3:00 (de la tarde).
Sin despertador: una app enviaría ondas a tu cerebro que te tienes que levantar.
Sin olvidarte de los mil sueños guays que tienes cada noche.
Sin emails.
Sin compañía: ¡qué bien se duerme cuando la cama no se comparte!
Sin tonterías: en cuanto sonara el despertador, café, 10 minutos de meditación y a trabajar.
Hakuna Matata.
Hasta el infinito y más allá.
Bibidy babidy bu.
Supercalifragilístico-espialidoso.
Qué hay más allá.
Un mundo ideal.
Volar. Mi apellido es IMPUNTUAL, con mayúsculas.
Tener fuerza como para conseguir el récord de levantamiento de piedras (sin ser vasca).
La invisibilidad (para poder desaparecer cuando me cruzo con alguien que no quiero ver).
El desdoblamiento (para poder hacer mil cosas a la vez).
La teletransportación (las tardes las pasaría en Bali).
Ver el futuro. ¡No me puedo morir sin saber si hay vida en otro planeta!
Emma Watson #heforshe.
Karl (el Kaïser).
El gato de Karl (Choupette).
Una agente confidential (acabas de ganar muchos mini-puntos :).
Steve Jobs.
Leandra Medine (Man Repellers, unámonos).