Salesas Secreto

Golda es una cafetería luminosa donde tomarte un café o un brunch agradable. Pero que no te engañen sus alegres azulejos amarillos. Porque por la noche, Golda se pone atrevida y se convierte en Golfa, un restaurante íntimo con velas, que se nota que es de los mismos que Fayer porque tiene una cartita corta y cambiante inspirada en la comida de oriente medio: Tartar Kubeniah, Latke & Caviar, Pierogi y Trufa. Eso sí, prepara la visa, porque es caro para las cantidades.

Al lado del precioso Ficus, por el número 6 de la calle Santo Tomé, verás una vitrina con plantitas primorosa y… cerrada. Pero si llamas al timbre a la hora a la que te han citado y sigues las instrucciones te dejarán atravesar el espejo y acceder a la Jack’s Library, una coctelería clandestina de rollo inglés donde se puede hablar tranquilamente mientras te bebes unos cócteles muy ricos con nombres literarios. “Para mí un Jane Austen, por favor”.

Cada año, un par de arquitectos enamorados del Arte de la Mesa viaja hasta el Valle del Loira rebuscando en anticuarios y casas de gente fina para acumular vajillas antiguas, cubiertos de plata y la cristalería más bella que hayas visto jamás. Luego, cuando llega diciembre, transforman su estudio en la cueva de Alí Babá para que puedas ir a comprar las maravillas que han ido colectando.

Si buscas un sitio donde poder cantar Marinero de Luces a grito pelao con tus amigas y a salvo de miradas indiscretas ve a Playback. Un karaoke secreto ultramegaestiloso, escondido dentro de una concept store preciosísima que tiene salas de karaoke escondidas para que vayas a darlo todo. 

Apunta: Calle Barquillo 22, 1ºD. Si te acercas por allí la primera quincena de noviembre y la de mayo, suelen organizar mercadillos con descuentos de hasta el 50% con marquitas francesas cuquis (je ne sais quoi asegurado) y otras marcas tipo American Vintage.

El restaurante multiestrellado de Diego Guerrero está arriba. Pero si en vez de subir, bajas las escaleras y corres las cortinas, te espera la coctelería más highway to hell de Salesas. Cócteles muy cañeros y diferentes (por ejemplo, el “Curry Colada”), que combinan a la perfección con sus encurtidos para picar. 

Salesas tiene de todo. Incluso una capillita para urgencias espirituales abierta las 24 horas. Pasa bastante desapercibida si no sabes dónde está, porque la puerta por fuera es feúcha, pero dentro descubrirás una capillita de estilo neoclásico con mucho encanto -con sus nubecitas, sus querubines, su Jesús. 

Próxima Parada no da directamente a la calle, y por eso a veces pasa desapercibida, pero es una tienda ultrachic de ropa y accesorios de fiesta made in Spain que merece la pena visitar si tienes que ir a un evento especial. Hace un tiempo, su dueña organizaba unas ventas especiales donde podías encontrar verdaderos tesoros con descuentazo. ¿La mala noticia? Ya no las hace ¿La buena? Dentro de la tienda han habilitado una pequeña zona de outlet permanente donde todavía podrás encontrar algunas prendas muy interesantes a buen precio.
 

Hay un montón de cafés chulos por Salesas: Casa Neutrale, East Crema Coffee (para llevar), Osom Coffee… Pero Altered tiene tostadas de queso Cebreiro con miel y frutos secos…

¿Qué hago con mi vida? ¿Habré tomado la decisión correcta? Si hay algo que te inquieta, te atormenta o te perturba tienes dos opciones: irte a Cachito de Cielo a buscar respuestas divinas (ver arriba), o hacerle una visita a la deliciosa Marie, una tarotista que emana buena vibra para que te eche las cartas y sea el Universo quien te resuelva las dudas. 

Estamos de acuerdo en que este sitio ya no es tan secreto (te hablamos de Zíngara aquí). Pero lo que sí que es secreto es que, en realidad, se trata de un restaurante vegetariano. La forma que tienen de elaborar cada plato para que ninguno se parezca al anterior y ni a cualquier cosa que hayas comido antes logra que la verdura se vuelva excitante: ensalada de higos con queso boffard, yogur de oveja y anacardos fritos, masala de tomate con un puntito picante… y todo sin rastro de carne. 

Pacífico está en la misma calle que Charrúa (si no has ido, has de ir, especialmente en invierno con las brasas a la vista en el local original). Pero pocas veces se avanza hasta el final de la calle. Error. Porque unos números más abajo hacen unas smash burgers (esas hamburguesas con la carne aplastá) jugosas con queso chorreando… que bien merecen ser conocidas a lo largo y ancho de la capital. Eso sí, el local es más o menos una barra y ya, así que no es para que te quedes allí viendo las horas pasar. Mejor para una comida rápida o para llevar. 

El barrio entero las conoce, pero si vienes de fuera es muy fácil pasarse la puerta del local de las Arce, dos hermanas con herencia culinaria que decidieron un buen día montar un local minimalista donde sirven unos pasteles y unos bollos artesanales muy ricos. ¿Nuestro favorito? El roll de canela, buenísimo. 

Lo hemos metido en este mapa porque es un secreto a voces (nunca mejor dicho) y eso también cuenta. Este piano/bar consagrado de la noche madrileña es famoso por sus noches canallas alrededor de su gigante piano de cola y por todo lo que se canta a horas intempestivas. El pianista no aguanta tonterías. Se liga bastante. Y hay gente de lo más variopinta. Te puedes encontrar desde a tu tío Ramón, hasta a Diego Boneta, Sebastián Yatra y Álex Speitzer entonando juntos una canción. Todo puede pasar en el Toni2.

“No coffee, no coke… Enjoy your grape juice”. Ya te lo dicen bien clarito en la carta. A este bar de vinos coqueto y agradable no se viene a pedir un café. Se viene a descubrir vinos selectos y diferentes. También tienen una carta breve con picoteo para que acompañes tu zumo de uva y no te pongas muy tinkiwinki. NOTA: Si te has quedado con mono de postre después del tinto, justo al lado está Cacao Sampaka, una tienda especializada en chocolate en todas sus formas y orígenes. 

A ver, la librería Antonio Machado es una institución. Pero ahora que se han mudado de local, todo es más mejor. Además de ser enorme, organizan coloquios, presentaciones y firmas de libros, talleres, actividades… Todo lo anuncian a través de su Instagram.

El local original lleva más de un siglo, pero desde hace un año o así, puedes tomarte sus adictivas palmeras de chocolate en el salón de té colindante. El sitio es monísimo: papel pintado, dosel de rayas, mostradores lujosos y unas cuantas mesas con sillas de terciopelo para ponerte fina (pero con clase) con todas sus delicias.

Este restaurante de comida paritana (cocina fusión parisina-gaditana) es otro secreto a voces. Pero como es nuestro mapa, hacemos lo que queremos y lo metemos también como must. Pensamos que en breve ganará una estrella Michelín. Por ahora acaba de ganar el segundo premio TheFork al mejor restaurante revelación (la votación la hacían los mejores chefs de España: Ramón Freixá, Dabiz Muñoz, etc.).

Los 33 es un restaurante de inspiración hispano-uruguaya especializado en comida a la brasa. Comparte socio con Charrúa (otro de los imprescindibles en el barrio), aunque este, es más asequible. Pídete las verduritas a la parrilla con puré de coliflor, el choripán, la entraña… y si te apetece una buena carnaza, tienen una chuleta gallega con pintaza. 

La dueña de esta cafetería-librería de Salesas es un amante del teatro. Así que no es de extrañar que haya montado esta cafetería superacogedora dedicada al género. Arriba, 5 mesitas redondas para uno o dos. Y toda una estantería repleta de libros, revistas de teatro y prensa, que si te interesan puedes comprar. Abajo, una sala con mesas más grandes para ponerte al día con tus amigas mientras disfrutas de un café acompañado de cosas ricas.